viernes, 29 de abril de 2016

El Alférez del Norte argentino: un alma de caballero en un hombre del Siglo XXI - Rincón de la Conversación

 027 Rincón de la Conversación re el alfér

 Paseo Alferez F 129 Avanzan los Camperos de S.S. Imagen039 venia con bandera

 Paseo Alferez F 095 El eje Iglesia Cruz Histórica frente al Cementerio Alto del Carmen BUENA  Alférez a cab Fiestas Patronales corrida 3 de febr

Los Alférez galopan y pasan ante los Santos Patronos, al frente de la Iglesia, En la procesión, el Alférez Mayor grita: -¡Venia! y todas las banderas relumbran al vuelo en honor de la Virgen y de San Sebastián

-De modo que nunca habías oído hablar de los alférez, salvo del Alférez de Aeronáutica! Se ve que poco has andado tierra adentro…, donde se conserva la Argentina auténtica, la que busca las diversas formas de excelencia acordes a los distintos ambientes y regiones.

-No, de ningún modo niego que también vive en Buenos Aires y en nuestras grandes ciudades, que tienen tanto de admirable. ¿Dónde hay parques como en Palermo, el Rosedal, el parque Urquiza, de Paraná, con su temible yaguareté, y tantos otros que embellecen y  matizan los centros poblados de este gran País?

La Argentina auténtica vive en todo su territorio. Sin conocerlo entero, estoy seguro de ello, pero tienes razón, es un buen tema de discusión.

Pero Alférez de los Santos Patronos, esa original adaptación del antiguo Alférez Real que conducía al combate las pequeñas fuerzas de los Cabildos y guardaba -en su casa- el Estandarte de la ciudad…eso no hay en todas partes. Que yo sepa, sólo en el Noroeste, pero me alegraría saber que no es así y si algún lector puede desmentirme le estaré muy agradecido. Pues el Alférez es un tipo humano noble, es un hidalgo de campo, de rancia estirpe criolla.

Por mis venas corre sangre de una noble santiagueña, de mi corazón la dueña, la más perfumada flor…, le canta el bardo criollo a su Señora madre.

Y ese Santiago que tiene al gran Aguirre cortando el aire con sus estocadas a los 4 vientos…, cuánta hidalguía, qué Madre de Ciudades!!

Sus fundadores sufrieron lo indecible, y es el origen de su grandeza. Los ataques de los indios, la escasez tremenda, el desgaste de las ropas compradas en Talavera de la Reina, reemplazadas por camisas de cabuya del campo. Lo cuenta Teresa Piossek en Poblar un pueblo… o en Los hombres de la Entrada. Su rigor histórico y ricos documentos… no hay novela que los pueda igualar en interés y suspenso… El tañido de un fierro para llamar a la tarde a la oración, a falta de campana… los rezos y los himnos cantados por los vecinos aprendidos en Castilla o Extremadura, de donde traían la imagen que luego volcarían, con el indio austero, con el negro laborioso y alegre, para levantar capillas blancas como copos de Palo borracho.

AguirreDe pronto, un Juan Gregorio Bazán, un Teniente de Gobernador de 4 abolengos perdido en una tierra casi irreal para un vasallo de Felipe II, hacía tocar el fierro a todo vuelo para convocar a aquellos hombrazos. -Señores, las tribus más belicosas se acercan embadurnadas con colores de guerra. Esta madrugada a las 5 partimos, y mañana les haremos frente, ayudados por los fieles Juríes, y al grito de “Santiago y a ellos!”, para salvar esta aldea de Dios perdida en miles de leguas, pues este islote es lo que resta en esta tierra de la cruz Redentora. El Divino Rey nos está viendo y pensando: si mis santiagueños me irán a fallar!… A su lado, el Apóstol caballero, nuestro Patrono, le dice: -Señor, si me dejas, parto en mi caballo blanco a darle fuerza a mis hombres, que son los Tuyos.

De esa pasta nacieron los Alférez. Los hay por todo el Norte. Son los que han nacido como esclavos de la Virgen o del Santo Patrono. En el caso de Sañogasta, aldea señorial que vio nacer el Primer Mayorazgo argentino, sus madres los consagran desde la más tierna edad al mártir San Sebastián, bajo la mirada bendita, maternal y protectora de la Virgen de Copacabana, Nuestra Señora de la Candelaria010 N S de la Candelaria y San Sebastián con multitud

Mira cuánto amor hay en ese pueblo de Alférez -o Alféreces, si prefieres la corrección gramatical al uso común. Esa es el alma del Alférez. Un gran amor, una gran dedicación,  una predisposición heroica a darlo todo en defensa de la Fe. Por eso son elegantes y desfilan con ese garbo, como diciendo sin jactancia: -aquí estamos! Somos pacíficos y respetuosos, pero queremos respeto a nuestras tradiciones!

La lectura y los estudios profundos requieren mucho tiempo sentados, pero no en la montura…, y los Alférez son gauchos, les gusta la acción. Correr las vacas en el campo inalambrable del Cerro, “cortar huella” sabiendo que por aquí pasó la yegua overa con el potrillo colorado, con el macho tinto y “el tostado”. Requiere mucha observación y haber nacido en eso. El Alférez es un hombre inocente. Tiene la sabiduría del niño, que admiraba el propio Nuestro Señor. Las cosas para él son simples, como aquel Kaunitz que prestaba servicios a la gran María Teresa de Austria, que le decía una vez a un jurisconsulto: “Perdón, Señor Doctor… No soy suficientemente abogado para no ver claro en este asunto…”

Estos pueblos tienen una densidad de caballos per cápita que no aparece en las estadísticas. Muchos son los niños que al año o dos ya han dado unos trancos a caballo ayudados por su padre o hermanos mayores. Más tarde, ¡quién los para!

Por eso, con el paso del tiempo, los contingentes de alférez crecen sin cesar. Algunos se vienen de lejos, andan varios días para poder estar en las fiestas para alegría de ellos y de todo el pueblo.

El Alférez es un pregonero implícito de una gran verdad enseñada por el Divino Maestro: “si no sóis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos”…; ni aunque vengan degollando… dirían ellos.

Que la Virgen nos ayude  a tener el espíritu de lo maravilloso que caracteriza al niño, y que debemos mantener toda la vida (la suma de las edades…) , para valorar nuestras verdaderas y épicas tradiciones católicas caballerescas y toda manifestación de excelencia.


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martes, 26 de abril de 2016

Muchos fieles católicos se preguntan: ▪¿Por qué obstruir el paso de los Alféreces a caballo alrededor de la cruz misional continuando 3 siglos y medio de tradición?

Si prospera el proyecto impulsado por el Párroco (izq.), una tradición riojana varias veces centenaria correrá peligro: el señorial desfile de los Alféreces de San Sebastián. Ayúdenos a defender lo nuestro!
 
Lo que muchos fieles católicos de Sañogasta se preguntan: 

En un pueblo típico de los Nevados de Famatina, ¿por qué tapar la tradición con 6 (¡seis!!) "aulas de catequesis" modernas?

La voz de los Papas:
San Pío X: "los verdaderos amigos del pueblo no son revolucionarios ni innovadores, sino tradicionalistas"

Francisco I a los hispanoamericanos en EE.UU.: "No se avergüencen nunca de sus tradiciones"

¿Por qué obstruir el paso de los Alféreces a caballo alrededor de la cruz misional continuando 3 siglos y medio de tradición?

Especialista en patrimonios históricos: "De edificarse el proyecto de las aulas, no sólo invadiría el espacio que enmarca al Monumento histórico sin contemplar mínimamente el lenguaje de la Iglesia, sino que alteraría de manera drástica a la Procesión , tan cara a todo el pueblo de Sañogasta, que lleva más de 350 años haciéndola”.

Soluciones verdaderas y accesibles, propuestas por vecinos del pueblo: ¿por qué no son tenidas en cuenta por las autoridades eclesiásticas?

¿No se debe estimular el sentido artístico de los que se están formando?
¿No se debe buscar el reflejo de Dios en la arquitectura, conforme a las enseñanzas de San Pablo?
 Agradecemos su difusión. Si no desea recibir mensajes por favor envíenos un mail para dar de baja. Gracias

sábado, 23 de abril de 2016

Sañogasta, un pueblo que irradia tradición bien entendida y cultura - Buscar el reflejo de Dios en la arquitectura











SAÑOGASTA: UN PUEBLO CON IDENTIDAD, QUE IRRADIA CULTURA Y TRADICIÓN
Qué hermosas son nuestras fiestas del 2 y 3 de febrero! Y también las noches de novena; ¡las antiguas campanas tocando al viento  anunciándolas, y la caja del Santo llamando a la gente!  Empiezan a llegar, la iglesia se colma en sus dos naves y la galería, los bancos de la plaza resultan pocos para los que no calzaron adentro, o tienen hijos chicos. En sus primeras vivencias de esta costumbre los niños tienen amplio espacio para corretear y moverse en el largo tiempo que duran los rezos y las ceremonias.
El pueblo, con el alma  motivada por la ancestral tradición, acude, participa, reza, recibe sacramentos, canta los himnos a los Patronos y toma gracias de los Santos en una fila interminable mientras varios alférez hacen la custodia de las imágenes; ¡qué belleza! Cada noche, los saludos fraternos con los familiares y amigos que van llegando del sur, del litoral, de Buenos Aires, para el reencuentro con la tan anhelada tradición…
La tradición bien entendida
Las sabias enseñanzas de los Papas son muchas. San Pio X, en su Carta Apostólica del 25 de agosto de 1910, dice: “Que estos sacerdotes -los que están frente a obras apostólicas- no se dejen extraviar por las opiniones contemporáneas, por el espejismo de una democracia falsa; que no tomen de la retórica de los peores enemigos de la Iglesia y del pueblo un lenguaje enfático, lleno de promesas tan sonoras como irrealizables. Estén convencidos que la cuestión social y la ciencia social no nacieron ayer; en todos los tiempos la Iglesia y el estado, felizmente concertados, han suscitado organizaciones fecundas; la Iglesia nunca ha traicionado la felicidad del pueblo haciendo alianzas comprometedoras, no tiene que separarse del pasado, y le basta reanudar, con la colaboración de los verdaderos trabajadores de la restauración social, los organismos rotos por la Revolución [anticristiana] y adaptarlos, con el mismo espíritu cristiano que los ha inspirado, al nuevo medio creado por la evolución material de la sociedad contemporánea, porque los verdaderos amigos del pueblo no son revolucionarios ni innovadores, sino tradicionalistas”. (Discorsi e Radiomessaggi, vol. XVIII, pág. 803).
En Filadelfia, en el histórico Hall de la Independencia, ante una multitud de 40.000 hispanos, le dijo S.S. Francisco I a la comunidad de latinoamericanos: “Ustedes traen muchos dones a su nueva nación. No se avergüencen nunca de sus tradiciones” (cf. www.perfil.com, 27/X/2016; “La Nación”, 26 /IX/ 2015) 
Con esta visión tan certera, tan sana y verdadera del magisterio pontificio, nos queda claro que Sañogasta no necesita de innovaciones que cambien su rumbo. Es un pueblo que ha resistido a los intentos de masificarlo cambiándole sus costumbres ancestrales, es notorio que irradia cultura, y es notorio también el atractivo y entusiasmo de sus Patronales como la cúspide de sus tradiciones.
¡Cómo son bellas, también, las manifestaciones de amor y alabanza a la Virgen del Valle, a la Virgen de Andacollo, a San Nicolás, y a San Expedito, expresiones de familias que con amor hacen las novenas y las procesiones, con encuentros de imágenes y Tincunaco; con sacrificio levantaron capillas en diferentes barrios.  Mayores manifestaciones de Fe enriquecen la tradición, con acompañamiento de alférez y camperos a caballo, y hacen un conjunto con la tradición gaucha que nos caracteriza.
Cultura y tradición van de la mano. Como en toda la historia, en la vida de un pueblo hay altibajos, pero ¡vamos adelante! ¡defendamos y cuidemos lo nuestro!
El 3 de febrero se expuso en la Iglesia, y aún permanece, un plano hecho en moderna computadora, con moderno proyecto concebido por un estudiante de arquitectura –quien nos pidió colaboración y le brindamos datos históricos- para obtener una buena nota en la materia… Hasta ahí no hay nada objetable.
Lo extraño es que ese  proyecto haya sido promovido para llevarlo a cabo, y en espacio reducido: la construcción de seis (¡6!) ambientes.
Añadir leyenda
Proyecto moderno que obstruirá el tricentenario desfile de los Alférez de San Sebastián a caballo, que se ve a la derecha (3 de febrero de 2016).
“De edificarse el proyecto de las aulas, no sólo invadiría el espacio que enmarca al Monumento histórico sin contemplar mínimamente el lenguaje de la Iglesia, sino que alteraría de manera drástica a la Procesión , tan cara a todo el pueblo de Sañogasta, que lleva más de 350 años haciéndola”. Arq. F. Esteban, Vicepte. Cámara de Turismo Rural (CATUR)
Vemos varios inconvenientes:
▪El Alto de la Iglesia no es la periferia de un barrio urbano masificado actual, que no tiene estilo ni espacio para la belleza de una construcción que merezca ser admirada por su consonancia  con el Monumento Histórico que es la iglesia, y la belleza y amplitud del paisaje.
▪Proyectan hacer seis piezas apiñadas, con el actual baño al centro (lo que  disminuye el libre acceso de los fieles en patronales y otros actos).
▪Será costoso y difícil demoler y acondicionar espacios con viejas cañería, pozos negros y demás restos de antiguos baños en desuso.
▪Ahoga por los costados la histórica Cruz que el Padre Aimón (1850) plantó para proteger nuestro pueblo de todo mal, y su arco de piedra; avanza sobre la Calle de las Campanas en su costado Este, ocupando el espacio por donde los alféreces y agrupaciones gauchas hacen su señorial cabalgata alrededor de la Cruz, para pasar frente a la puerta principal de la Iglesia donde está el Santísimo, y ofrecerle la venia.
▪La Iglesia es un Monumento Histórico Nacional. Hay normas legales que evitan que los lugares históricos sean tapados o deformados, pues es un elemento esencial de nuestra identidad que las ideologías masificantes quieren destruir, como advierten los Sumos Pontífices. Un ejemplo de éstas es la Teología de la Liberación, basada en el concepto marxista-tercermundista de lucha de clases, de la que era adepto explícito el Párroco Gervasio Mecca, que abandonó la Iglesia de San Sebastián para presionar a nuestra gente hasta tanto se le diera la escritura.
Sobrados títulos tiene esta Iglesia para haber sido declarada Monumento Histórico. Hecha en 1640, casi dos siglos antes de la Independencia, por Pedro Nicolás de Brizuela -“con paredes de barro a fuerza de pisón”, dice un documento de época-, con las imágenes de nuestros Patronos para la evangelización. 
Allí y entonces nacieron tan bellas tradiciones. La pila bautismal está aún dentro de esas “paredes de barro”, y sirvió para la cristianización de nativos y de todos los habitantes de este bendito suelo hasta que se amplió  con una nueva nave en 1850, bendecida con la presencia y acción del misionero Padre Aimón (ver EL ALFEREZ nº 3/16).
Con el paso de los años las costumbres se fueron enriqueciendo, y aquí estamos hoy para seguirlo haciendo, para seguir avanzando en el camino de la tradición, fuera del cual –enseñan los Papas- no hay verdadero progreso, pues asegura que el día de hoy no sea la negación del día de ayer sino su armónica continuación (ver EL ALFEREZ 1/15).
Volvamos al proyecto para albergar 80 chicos en un invierno que se anuncia muy crudo (aviso parroquial dado el domingo 17 de abril).  No es la única, ni la mejor manera de cubrir esa necesidad.
Son tres grupos de catequesis. Hay una opción más fácil, rápida y mucho menos costosa, más linda y acorde al estilo de la Iglesia, donde no molesta y es de fácil acceso: construir tres salas, en hilera, cada una con su puerta y ventanas, sobre la ancha Calle de las Campanas,  a la orilla de la plaza.  Cáritas puede usar una de ellas, teniendo un buen armario para guardar sus cosas; nunca trabajarán en el mismo horario con los de catequesis, y no costaría lo mismo que construir una pieza. Se haría en terreno de la Iglesia y en estilo acorde a ella; estaría ubicada a una distancia del edificio sagrado para no transgredir las normas  que amparan los  monumentos históricos.
Cosa necesaria, sí, es terminar el frente de los baños, que cuando se hicieron, se cambió la comisión y quedaron como están. Hay un boceto para completar el frente con arcos y faroles en un angosto corredor, tipo galería, con tejas de modo que se disimule el tanque de agua; de acuerdo a los arquitectos consultados, va a dar gusto mirarlo. 

¿No les parece que, dentro de lo posible, hay que construir cosas que adornen nuestro Alto de la Iglesia, y sea  un orgullo para nosotros? Un edificio colonial bonito para las aulas, que contribuya al carácter típico del pueblo, que atraiga a los visitantes que vienen desde lejos a ver La Rioja tradicional, huyendo de lo anónimo y masificado -que aquí se quiere imponer, contra la ley y la lógica. La homogeneidad arquitectónica contribuirá para que Sañogasta, con todos sus encantos, sea considerado una atracción cultural.     
                 
Hemos presentado varios bocetos de aulas en estilo colonial  como contribución  para las salas de catequesis y cáritas

Buscar el reflejo de Dios en la arquitectura
El Paseo de los Alférez que proponemos al pueblo y a las autoridades eclesiásticas y civiles es un proyecto fácil de realizar,  que embellece el lugar y aumenta el sentido artístico de los que se están formando, y que, siguiendo lo que enseña San Buenaventura, Patrono de Vichigasta, Doctor de la Iglesia, tiene el objetivo de llevar al conocimiento y amor de Dios pues, como dice San Pablo: las perfecciones invisibles de Dios  se han hecho visibles después de la creación del mundo por el conocimiento que de ellas nos dan sus criaturas (Rom., 1, 20).  Es la razón del contraste entre la arquitectura colonial, nacida de la Civilización Cristiana que creaba ambientes propicios para encontrar el reflejo de Dios, y cierta arquitectura materialista y sin gracia, propia de una época conturbada, que dio las espaldas a su Creador.
Asimismo, el Paseo incentiva la participación de los jinetes, un tipo humano tan sañogasteño que entusiasma a nuestros jóvenes!
Claro que… es necesario aplicar el sentido común, sin resentimientos, sin “peros” por sólo poner inconvenientes, y trabajar con buena voluntad. No olvidemos que no somos eternos y que un día rendiremos cuentas de nuestros actos ante el Justo Juez de lo que hicimos teniendo en nuestras manos la Casa de Dios.
Que nuestros Patronos, la Virgen Madre de la Candelaria y San Sebastián, nos ayuden a hacerlo así, y ¡adelante!

BOLETIN “EL ALFEREZ”
Sañogasta – La Rioja
Nº 4 - Abril de 2016
Vea estas fotos a todo color en el blog “Argentina, señorío y esplendor”
Facebook “Sañogasta El Alférez”
▪ bastiondelnorte@gmail.com

miércoles, 13 de abril de 2016

Rodolfo Plaza Navamuel sobre los orígenes del malbec

 Rodolfo Plaza Navamuel - para El Intransigente - Salta

SALTA

El próximo 17 de abril se celebrará el Día Internacional del Malbec

Rodolfo Plaza se anima a hablar acerca de los orígenes del Malbec y su posterior desarrollo

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El próximo 17 de abril se celebrará el Día Internacional del Malbec
Malbec

SALTA (Rodolfo Leandro Plaza Navamuel) -  El 17 de abril se conmemorará el Día Internacional del Malbec, por lo cual El Intransigente adhiere a estas celebraciones, solicitando al académico titular de la Academia Argentina de la Vid y del Vino, don Leandro Plaza Navamuel la nota que a continuación publicamos, donde se explaya acerca del origen de este vino insignia del país, en la provincia de Salta.          


DON WENCESLAO PLAZA Y LAS PRIMERAS CEPAS DE MALBEC EN LA PROVINCIA DE SALTA 
Por Rodolfo Leandro Plaza Navamuel *


Si bien a la uva Malbec –hoy cepa insignia de la industria vitivinícola argentina-, se atribuye haberla traído a Mendoza mediados del siglo XIX, al francés Michel Aimé Pouget, ingeniero agrónomo que por iniciativa de Domingo Faustino Sarmiento se puso al frente de la Quinta Normal de Agricultura de Mendoza en 1853,otro es el momento de aquella olvidada cepa francesa en la provincia de Salta y es a un tercer gran hombre a quien los salteños debemos el Malbec, don Wencesalo Plaza, un productor progresista que en 1886 introdujo y desarrolló con éxito el cultivo de ésta y otras cepas francesas, mejorando la calidad de los vinos salteños.
No obstante, cabe aludir que Peuget también había dirigido la Quinta Normal de Santiago en Chile, creada en 1841 por el mismo Sarmiento, ambos exiliados en el país trasandino, donde Pouget introdujo de Francia plantas y semillas que incluía varias cepas, como Cabernet Sauvignon, Pinot Noir y Malbec.
Desde 2011 la Argentina homenajea a Pouget con el Día Mundial del Malbec cada 17 de abril, festejo que se ha extendido a más de 45 ciudades alrededor del mundo y nuestra provincia, desde su propia historia vitivinícola, adhiere a estas celebraciones. El Malbec en el mundo, hoy por hoy es considerado como un "sinónimo de vino argentino”. Pero, vamos por parte.
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El Cnel. D. Wenceslao Plaza trajo desde Chile a
Salta las primeras cepas francesas en 1886
Pocos son los que saben quién fue este pionero de la vitivinicultura
argentina que nació hace 165 años, pero su nombre aún resuena
entre la gente mayor de los Valles Calchaquíes
              Cuando los conquistadores hispanos se convirtieron en colonizadores, entre sus primeras acciones estuvo la de plantar viñas. El visionario Francisco de Aguirre hizo introducir originalmente la vid en Santiago del Estero, remitiéndolas desde Coquimbo y encomendando al padre Juan Cidrón con las primeras plantas de vid aproximadamente en 1556. A partir de entonces, se puede sostener que nace el vino en Argentina, aunque indiscutiblemente las especies de vitis vinífera que hoy se producen no son las mismas que la de aquellos años, ya que la evolución vitivinícola argentina se debe a la incorporación de nuevas variedades de uvas y avances tecnológicos desde mediados del siglo XIX.           
El vino se elabora en tierra salteña desde hace prácticamente cuatro siglos y medio de la mano de antiguos conquistadores y fundadores, como el gobernador del Tucumán Francisco de Aguirre, el padre Juan Cidrón o el general Juan Ramírez de Velasco. Emilio Schleh sostenía que "en 1618 se mencionaban ya los vinos del Tucumán y se hacía comercio de ellos con Buenos Aires, adonde se remitió en el citado año, en vista de la escasez del litoral, cuatro carretas con botijas de vino”.     
En el siglo XVIII funcionaba en el Valle de Calchaquí la bodega de don Julián de Lea y Plaza, dueño de vastas propiedades. En su terruño experimentó afanosamente con algunas cepas ingresadas a los Valles por los jesuitas y mercedarios, a las que agregó nuevas variedades que trajo de sus viajes al Alto Perú y Chile en 1769. El cultivo de la vid en aquella zona es de antigua data y don Julián es de los pioneros en el siglo XVIII, quien animado por sus inquietudes progresistas, hizo construir una bodega muy bien equipada con sus útiles, alambiques, vasijas y lagar en la Estancia de Caracha, de heredad paterna, en la cual elaboraba aguardiente y vinos destinados al consumo familiar y a un reducido comercio en la zona. En 1795 se trasladó a Molinos para cumplir la función de Juez partidario y llevó su actividad agroganadera, introduciendo también planteles de viñas e instalando otra bodega. Sus hijos heredaron las bodegas y a la vez transmitieron a sus descendientes la afición por la producción de uvas, y una innegable destreza en el proceso de vinificación, faena que iba a difundirse rápidamente años más tarde en toda la extensión vallista.
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Gran sala colonial, todavía conocida como la casa de los Plaza, donde hubo un famoso "molino de piedra” en el cual se procesaba la producción de granos. Bodega y parte de los campos y río de la antigua Estancia de Caracha (San José de Cachi), fundada por don Miguel de Lea y Plaza a mediados del siglo XVIII. En torno de esta estancia y de sus dueños se formó y desarrolló el pueblo de San José de Cachi. La sala aún hoy se conserva en pie y en ruinas (Fotografía enero / 2014 © Leandro Plaza Navamuel) 
         La elaboración de vinos alcanzaría décadas más tarde una señalada importancia, comenzando a ser reclamados por el comercio; fue entonces que uno de sus nietos, el coronel don Wenceslao Plaza, introdujo en los Valles Calchaquíes desde Chile las primeras vides francesas en 1886, entre otras, la variedad tinta Malbec, cultivadas en su establecimiento La Perseverancia, en Animaná; es decir, que inició la plantación de viñedos de uvas finas que hicieron cambiar la vieja industria vitivinícola, constituyéndose don Wenceslao a fines del siglo XIX en uno de los más importantes productores vitivinícolas de la provincia, reconociéndose sus vinos por su calidad en todo el NOA. Posteriormente, su afán progresista, hizo que trajera a Salta de sus viajes a Chile otras variedades francesas, como la Pinot (blanca y tinta) y Lorda o Tannat, propulsando además la implementación de un nuevo sistema de riego por canales que se venía utilizando exitosamente en Mendoza, en reemplazo del viejo sistema por anegamiento en tazas altas y cuadros, difundido en los Valles desde tiempos remotos. "El cuidado con que están mantenidos estos viñedos, es digno de señalarse”, así lo registraba en un informe el Centro Vitivinícola Nacional en 1910. Avances y cepas que luego llevaría su hijo don Virgilio, a su Estancia San Pedro de Yacochuya.

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Fotografía que muestra una época de progreso en el Valle de Calchaquí,
como el actual estado de ruina en el que se encuentra la sala de
La Perseverancia. La casa de La Perseverancia fue la más
importante de los Valles Calchaquíes durante casi un siglo y
fue el eje fundacional del pueblo de Animaná
(© Leandro Plaza Navamuel)
          
En la segunda mitad del siglo XIX, don José Modesto Moreno del Corro era dueño de una bodega en su finca La Banda (o La Claudia), en Cafayate. Hacia fines del siglo XIX, las mejores bodegas eran la de don Salvador Michel y La Perseverancia de don Wenceslao Plaza en Animaná, la de don Amadeo Vélez en Angastaco, la de López Hermanos en San Felipe, y La Angostura que primero fue de don Indalecio Gómez y luego de don Juan Uriburu. Don José Antonio Chavarría con la bodega La Rosa, y El Recreo de Peñalva Hermanos, en Cafayate, dirigida por don José Tomás de Peñalva Frías.           
En esta época se cultivaban vides Criollas, Moscatel y Malbec, a las que se irán incorporando cepas de Torrontés, Ferral, Carignan, Alicante Bouché, Pinot, Semillón y Lorda o Tannat, entre otras. Así, pues, el progreso llegó de la mano de estos pioneros, y la elaboración del vino en Salta, a principios del siglo XX, ya era considerada como la industria de mayor importancia.        
El coronel Wenceslao Plaza (1850-1929), gran filántropo, líder político y comandante de la Guardia Nacional en ocasión del conflicto limítrofe con Chile en 1895, fue el fundador del pueblo de Animaná, Departamento de San Carlos, Salta entregando parcelas de tierras a sus peones entre los años 1875 y 1886.           
Hombre de ideales y principios, preocupado por tantos problemas sociales y políticos que afligían a su país, juntamente con otros conocidos salteños se integró a las filas de la Unión Cívica Radical, convirtiéndose de tal manera en uno de sus fundadores en Salta. Desechó "en toda oportunidad posiciones públicas a las que su destacada actuación le hacían merecedor; jamás, por modestia y desinterés, aceptó formar parte de la administración pública”, pese a los innumerables ofrecimientos de altas candidaturas o escaños de ministerios o secretarías "prefirió en todo caso prestar otra clase de servicios en bien de sus semejantes y de su Patria”.           
Don Wenceslao Plaza fue hijo del guerrero de la Independencia, Tte. Cnel. D. José Remigio de Lea y Plaza, miembro de una de las Casas que más hijos y fortunas aportó para procurar y consolidar los grandes principios de nuestra nacionalidad. Hacendado, vitivinicultor e insigne patriota que en 1811 se incorporó al Ejército en la "Compañía de Cachi”, es decir, a los 15 años de edad, integrándose a las fuerzas que crearon en el Valle de Calchaquí algunos de sus familiares, las que eran mandadas por su primo hermano y cuñado, el coronel don Luis Borja Díaz de Lea y Plaza, de sobresaliente actuación en la Guerra de la Independencia.           
Se halló en la Batalla de Salta, en Vilcapugio y Ayohuma. Combatió en Humahuaca, Orán, Yavi, el Alto Perú y en diversas acciones de hostigamiento a invasiones realistas que amenazaban la provincia, siendo apresado y trasladado por los enemigos a una cárcel de Potosí. Luego se incorporó al "Batallón de Infantería” que marchó a la guerra contra el Brasil y en 1825 levantó a su mando un importante contingente de hombres que integraban la "Segunda Compañía del Primer Escuadrón de las Milicias de Caballería de los Valles”. Fue comandante de las "Milicias Provinciales de Cachi”, de las "Milicias de Caballería de los Valles”, del "Batallón de Infantería de Granaderos Unitarios”, y de las "Fuerzas Revolucionarias de Caballería Unitaria”, actuando en Tucumán y Catamarca. Triunfante en Salta la causa federal en 1836, fue perseguido y condenado a ser apresado o fusilado, debiendo exiliarse a Bolivia y Chile. A su regreso, alternando entre la milicia, la atención de sus heredades ganaderas y vitivinícolas, el hogar y crianza de sus hijos pequeños, don José Remigio de Lea y Plaza falleció en su casa en la noche del 17 de diciembre de 1863, siendo sepultado en el Panteón nuevo de la Parroquia de Cachi.

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Casa que hizo construir para su residencia, el guerrero de la Independencia Tte. Cnel. D. José Remigio de Lea y Plaza, a fines de la década de 1820, solar que habitó durante casi cuarenta años. El inmueble recayó a través de los años en manos de diferentes propietarios. Actualmente, según nos informan pertenece a los descendientes de la familia Tedín y por eso es conocida como la Casa Tedín, siendo reconstruida y puesta en valor por el Gobierno de Salta, a través de la Dirección General de Patrimonio de la Provincia

Este análisis no solo viene oportuno por las celebraciones del Día Internacional del Malbec, motivo inicial por lo que El Intransigente me solicitó este artículo, cuya deferencia agradezco, sino por los Seminarios Internacionales de la Cátedra UNESCO de Turismo Cultural UNTREF-AAMNBA que en nuestro país viene realizando desde noviembre de 2014, como "Paisajes Culturales de la viña y el vino. Aportes para su protección y desarrollo sostenible en la Argentina”, en el cual participé con una ponencia sobre "Salta. El valor de la historia como soporte de los caminos del vino”. En esta línea, en los próximos días se realizará un nuevo Seminario internacional de la Cátedra UNESCO de Turismo Cultural "Los paisajes vitivinícolas de la Argentina en el contexto del Patrimonio Mundial”, considerando entre sus fundamentos que "la República Argentina tiene un patrimonio cultural de paisajes vitivinícolas con casi cinco siglos de historia, que deben reconocerse, protegerse y apoyarse en su desarrollo sostenible”, localizándose en las provincias de Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza, Neuquén y Río Negro y en otros enclaves menores, como Córdoba y Buenos Aires. Asimismo, la UNESCO observa que "La identidad cultural de nuestras regiones está indisolublemente atada al patrimonio material e inmaterial de la viña y el vino, que no es estático, sino que vive y se transforma y le otorga una dimensión social y territorial a la vitivinicultura, todavía no debidamente comprendida ni integrada en la concepción más abarcativa de paisaje cultural, que especifica una dimensión de varias y complejas problemáticas”. Razón por la que, con este pequeño aporte, deseamos a la UNESCO, el mejor de los éxitos en este Seminario.
* Por Rodolfo Leandro Plaza Navamuel. El autor es académico titular de la Academia Argentina de la Vid y del Vino. Vicepresidente, director y coordinador general de publicaciones del Centro de Investigaciones Genealógicas de Salta y del Instituto Güemesiano de Salta. Diplomado universitario en genealogía y heráldica (USP-T). Ha obtenido importantes distinciones. Autor de Génesis de la vitivinicultura salteña (2008), entre numerosos libros de historia y genealogía y de diversos artículos históricos y culturales en diarios y revistas argentinas.
http://www.elintransigente.com/salta/2016/4/12/proximo-abril-celebrara-internacional-malbec-377845.html